26 enero 2018

Andragogía y después, la heutagogía

Dentro de la terminología utilizada en el campo educativo, encontramos palabras con peso específico como pedagogía, andragogía, psicopedagogía... En el año 2000 Steward Hase y Chris Kenyon, de la Southern Cross University de Australia acuñaron un nuevo término, silogismo para ser más precisos, que es la heutagogía, el cual designa el aprendizaje auto-determinado de las personas adultas. Si recurrimos a la etimología, vemos que la palabra procede del griego y significa, según sus diversas acepciones, “encontrar” o “inventar”.

En este caso es el propio adulto quien decide, elige y define, de manera voluntaria y autónoma, qué es lo que quiere aprender, qué necesita, cuáles son los objetivos de su aprendizaje, los contenidos que quiere adquirir y la metodología que mejor se adapta a sus intereses, expectativas, tiempos y contexto. Él es quien organiza sus tiempos y espacios, impone los ritmos de estudio, busca los recursos y fuentes, e indaga los problemas y temas de su interés.

Alireza Darvish


Comparto algunos interrogantes que se entrecruzan en este campo: ¿Estamos hablando y describiendo a un autodidacta puro? ¿O, en el marco de la inteligencia colectiva que subyace en el universo Internet, estamos frente al fenómeno del autodidacta que se nutre del aprendizaje de tipo conectivista a través de las conexiones de miles de usuarios que aportan cientos de recursos para que configuremos nuestro propio itinerario educativo y construyamos nuevos saberes? ¿La heutagogía es posible y adquiere sentido porque la red Internet favorece la inmersión y facilita la búsqueda de aquello que queremos aprender? ¿Es la web un colosal e inacabado catálogo para elegir contenidos, recursos y actividades y así armar nuestro propio curso con total libertad y bajo nuestra responsabilidad? ¿Cuál es el lugar del otro, de los pares y de los educadores en esta tendencia autodidacta?

En "Andragogía no Pedagogía" (1972), Malcolm Knowles sostiene "La Andragogía es el arte y ciencia de ayudar a aprender a los adultos, basándose en las ideas acerca de las diferencias entre niños y adultos." Entre las características que describen a un adulto encontramos que tiene experiencia, un auto-concepto de sí mismo, sabe qué quiere aprender con una orientación centrada en situaciones, problemas, decisiones y mejoras permanentes en su vida personal, social y laboral, por lo cual la motivación hacia el aprender está descontada.

Por su parte, la Heutagogía -que reconoce a la andragogía como su antecedente-, supera la perspectiva andragógica ya que el adulto asume de manera libre y crítica la dirección de su aprendizaje y aprovecha las posibilidades que las tecnologías le ofrecen para concretar su objetivo de manera versátil y flexible, en sus tiempos disponibles y con las herramientas con las que cuenta. Por eso hablamos del aprendizaje auto-dirigido, sin participación en sentido estricto de facilitadores, animadores o educadores.

Bibliografía:
De Natale, M., (2003). La edad adulta, una nueva etapa para educarse. Narcea. S. A. de Ediciones. Madrid.

Hase, S. (2009). Heutagogy and e-learning in theworkplace: Somechallenges and opportunities. Impact: Journal of Applied Research in Workplace E.learning, 1(1), pp. 43-52. Australasia, Oceanía. https://www.researchgate.net/publication/254664047_Heutagogy_and_e-learning_in_the_workplaceSome_challenges_and_opportunities

Hase, S. y Kenyon, C. (2001). FromAndragogy to Heutagogy. Southern Cross University, Australia.

Santos Guerra. M. (2017). Heutagogía. Blog disponible: http://mas.laopiniondemalaga.es/blog/eladarve/2017/09/02/heutagogia/

12 enero 2018

Lo visible y lo invisible de una foto


Robert Doisneau, Aburridos en la escuela 


El fotógrafo francés Robert Doisneau fue un extraordinario maestro de la fotografía narrativa y callejera que supo capturar la belleza de la vida cotidiana. Entre las célebres fotografías les propongo analizar “Aburridos en la escuela”, de 1956, en la que parecen asomarse algunos rasgos propios de un sistema escolar que no responde a las características, intereses y subjetividades de los alumnos. No en vano en ese tiempo Iván Illich (1958) se había dado cuenta de que “para la mayoría de los seres humanos, el derecho a aprender se ve restringido por la obligación de asistir a la escuela”, un pensamiento que luego se plasmó en su famoso libro “La sociedad desescolarizada” (1971).
¿Creen ustedes que eso es lo que captó la fotografía de Robert Doisneau?

01 enero 2018

La fuerza de la vida


Pérez Celis, El mar


Lo que yo deseo, la fuerza que yo busco, no es aquella que te lleva a perder o a ganar. Tampoco quiero una muralla para repeler las fuerzas que lleguen del exterior. 
Lo que yo deseo es una fuerza que me permita ser capaz de recibir todo cuanto proceda del exterior y resistirlo. 
Fortaleza para resistir en silencio cosas como la injusticia, el infortunio, la tristeza, los equívocos, las incomprensiones.

                                                                                      Haruki Murakami