Malala Yousafzai, la joven paquistaní de 16 años, que hoy es un símbolo
de la lucha por el derecho a la educación recibió esta semana el Premio Sájarov
en el Parlamento Europeo.
Recordemos que Malala aprovechó el mundo de las TIC,
a través de un blog, para expresar y denunciar las restricciones en el acceso a
las escuelas de niños y niñas de su país.
Esa defensa de los derechos a la
educación le ocasionó un brutal ataque del cual ya se recuperó. Al recibir el
premio a la Libertad de Conciencia, Malala se lo dedicó “a los héroes sin nombre de Pakistán y a todos los que luchan por los
derechos y las libertades”, y al referirse a las grandes desigualdades que
hoy persisten en el mundo, señaló que “Algunos
niños no quieren consolas, quieren un libro y un bolígrafo para ir al colegio”.