31 octubre 2022

Actividades de aprendizaje y evaluación en educación a distancia

Uno de los desafíos de los procesos de aprendizaje se focaliza en las actividades que se proponen a los estudiantes y su vinculación con una perspectiva de la evaluación formativa y sumativa. En la educación a distancia a través de entornos virtuales, dicho desafío reviste un carácter especial que demanda no sólo encuadrarnos en el marco teórico que sustenta el proyecto académico, sino también generar nuevos formatos e instrumentos que nos habilitan las TIC.


Chiharu Shiota

En este contexto, compartimos el artículo de Julio Cabero-Almenara y Antonio Palacios-Rodríguez (2021): La evaluación de la educación virtual: las e-actividades, en donde se analizan los propósitos de las actividades de aprendizaje, sus peculiaridades cuando se aplican en los entornos virtuales y sus implicaciones para el proceso de evaluación.


Después de exponer algunos elementos conceptuales, los autores señalan que las e-actividades son “todas las tareas desarrolladas por el estudiante de forma individual o colectiva en un entorno digital, y que están destinadas a obtener un aprendizaje específico. Son, por tanto, el vínculo que une la enseñanza y el aprendizaje en línea. Sus características y funcionalidad serán las mismas que las realizadas en contextos presenciales; si bien las diferencias fundamentales se encuentran en las posibilidades que ofrecen los entornos virtuales para favorecer un contexto interactivo tanto con la información como entre los diferentes participantes de la acción formativa, profesorado y alumnado. Al mismo tiempo, la red permite que el alumnado desarrolle tanto actividades individuales como grupales y colaborativas, e interaccionar en un entorno multimedia e hipertextual”. (Cabero, 2014). 

Ambos autores, profesores de la Universidad de Sevilla, sostienen que “si no queremos convertir los entornos de formación en red en entornos puramente expositivos de bloques de datos y de información, ante los cuales el alumno lo único que debe hacer es memorizar la información que se le presenta, se deben incluir una serie de actividades con las cuales persigamos diferentes objetivos que vayan desde la comprensión de los contenidos, la transferencia a otras situaciones y hechos diferentes a los presentados, o la profundización en los mismos”.

Lo dicho demanda diseñar propuestas de actividades individuales y grupales de distinta complejidad que remitan a capacidades cognitivas de nivel superior, desestimando las pruebas estructuradas de respuesta cerrada cuando están asociadas a la mera retención de información y al aprendizaje de tipo memorístico.

Según Cabero (2013), las funciones que desempeñan las e-actividades son diversas:

1. Clarificación de los contenidos.

2. Transferencia de la información a contextos y escenarios diferentes en los cuales fueron presentados.

3. Profundización en la materia.

4. Adquisición de vocabulario específico.

5. Socialización.

6. Aplicación de los contenidos a su actividad profesional.

Por su parte, Maina (2020) señala que hay diferentes tipos de e-actividades que se pueden poner en funcionamiento en la formación en red, y menciona las siguientes:

a) Actividades de análisis y síntesis.

b) Actividades de investigación o resolución de problemas.

c) Actividades de interacción y comunicación.

d) Actividades de construcción colaborativa de conocimiento.

e) Actividades de reflexión.


Sin lugar a dudas, el repertorio de e-actividades es amplio y permite fusionar el aprendizaje individual con el grupal colaborativo en línea, ofreciéndonos evidencias sobre logros socio-cognitivos significativos y dificultades en orden a la formación de excelencia.

El artículo completo está disponible en:

https://revistas.uned.es/index.php/ried/article/view/28994

 

Cabero-Almenara, J., y Palacios-Rodríguez, A. (2021). La evaluación de la educación virtual: las e-actividades. RIED. Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, 24(2), pp. 169-188. https://doi.org/10.5944/ried.24.2.28994

 

20 octubre 2022

Percepciones de estudiantes sobre los MOOC

En este blog en más de una ocasión hemos hablado de los cursos MOOC, reconociendo en ellos una oportunidad para acceder a instancias formativas a través de entornos virtuales, en diversidad de temáticas y destinados a distintos grupos etarios. Tal como indican diferentes estudios (Benet et al., 2018; Palacios et al., 2020), los MOOC ofrecidos por universidades de todo el mundo configuran una herramienta potente para la formación y la educación permanente en una sociedad que nos demanda cada vez más conocimientos y habilidades.

Desde esa realidad, queremos compartir un estudio publicado en EDUTEC. Revista Electrónica de Tecnología Educativa (septiembre 2022) que aborda una dimensión sustantiva para seguir pensando en los alcances de estos cursos en línea y, particularmente, en las percepciones de los estudiantes sobre esas ofertas. El título del artículo es: El alumnado universitario como evaluador de materiales educativos en formato t-MOOC para el desarrollo de la Competencia Digital Docente según DigCompEdu. Comparación con juicio de expertos, y en el resumen encontramos elementos que definen el estudio y sus resultados.  

“En  los  últimos  tiempos,  los  MOOC  se  han configurado  como  una  tecnología  que  viene ganando   terreno   en   el   campo   educativo suponiendo un nuevo enfoque en la educación a distancia. Del mismo modo, se ha incrementado su presencia en las instituciones educativas y el nivel de  investigaciones  y  publicaciones  que  giran alrededor  de  estos  desarrollos  tecnológicos.  En concreto,  esta  investigación  se  centra  en  la evaluación de un t-MOOC (basado en la entrega de tareas), diseñado y producido para el desarrollo de competencias   digitales   según   el   Marco DigCompEdu a través del juicio de expertos. En su evaluación participan 76 estudiantes del Grado de Pedagogía y 292 expertos que obtienen un índice de competencia experta igual o superior a 0,9. Las puntuaciones alcanzadas permiten señalar que el t-MOOC  se  valora de  manera  muy  positiva. Igualmente,  el  estudio  pone  de  manifiesto  la significación  del  alumnado  universitario  como evaluador  de  materiales  educativos.  Por  este motivo,  se  reflexiona  sobre  las  posibilidades didácticas que este tipo de metodología añade a los nuevos escenarios educativos”.

“Los resultados avalan también una forma de diseñar el t-MOOC, que viene caracterizado por la incorporación de distintos recursos para la presentación de la información, que van desde clip de vídeos, animaciones, infografías, hiperenlaces..., y la presentación de diferentes actividades o tareas a realizar en cada módulo o unidad. En definitiva, el material ha sido diseñado desde una perspectiva multimedia y en el abandono de la idea de que los materiales desarrollados para  la  formación  virtual  sea  una  mera  traslación  digital  de  los  recursos  impresos (Sahasrabudhe y Kanungo, 2014; Ljbojevic et al., 2015; Salim y Luo, 2019) y de incorporar e-actividades a realizar por los estudiantes (Silva, 2017; Burcin et al., 2020; Cabero-Almenara y Palacios-Rodríguez, 2021)".

El artículo se puede consultar en:

https://www.edutec.es/revista/index.php/edutec-e/article/view/2503/1011

 

05 octubre 2022

El sentido de la amistad, la presencia del amigo



 Soneto del Amigo    Vinicius de Moraes

En fin, después de tanto error pasado,

tantas represalias, tanto peligro,

resurge en otro el viejo amigo

nunca perdido, siempre reencontrado.

 

Es bueno sentarlo nuevamente al lado

con ojos que contienen la mirada antigua

siempre conmigo un poco atribulado

y como siempre singular conmigo.

 

Un bicho igual a mí, simple y humano

sabiendo moverse y conmoverse

y a disfrazar con mi propio engaño.

 

El amigo: un ser que la vida no explica

que sólo se va al ver otro nacer

y el espejo de mi alma multiplica.