07 enero 2025

Perspectivas e imágenes del sueño

A todos nos gusta soñar, dormidos o despiertos... Sueños que se perfilan como utopías, como ideales, otros que son pesadillas y que olvidamos con facilidad, sueños recurrentes, sueños que nos persiguen, sueños predictivos, sueños realizables y otros inalcanzables....

Cuando soñamos despiertos podemos crear una historia diferente a la real y viajar por todos los rincones de nuestro ser, buscando y construyendo los seres y las cosas que más nos gustan. Soñar despiertos también nos moviliza para buscar metas y proyectarnos en el tiempo y en el espacio, para transformar o modificar algo de nuestra vida y nuestro mundo.


La siesta y su sueño, Antonio Berni


Refiriéndose al poder maravilloso del sueño, el poeta alemán Hölderlin dijo:

El hombre es un dios cuando sueña y no es más que un mendigo cuando piensa.

Mientras que Schopenhauer expresó:

La vida y los sueños son hojas de un mismo libro, leerlas en orden es vivir y hojearlas, es soñar.

Diferente es la percepción del sueño que nos da Ernesto Sábato:

El sueño es otro libro, es un libro donde impera otra lógica y donde el argumento es completamente distinto.

El escritor Edgar Allan Poe así percibe a los sueños:

Todo lo que vemos desfilar ante nuestros ojos, todo lo que imaginamos, no es sino un sueño dentro de otro sueño.

El gran Jorge Luis Borges también tuvo espléndidas expresiones dedicadas a la actividad onírica, como esta poesía llamada precisamente El sueño:

Si el sueño fuera (como dicen) una tregua, un puro reposo de la mente, ¿por qué si te despiertan bruscamente, sientes que te han robado una fortuna? ¿Por qué es tan triste madrugar?

La hora nos despoja de un don inconcebible, tan íntimo que sólo es traducible  en un sopor que la vigilia dora de sueños, que bien pueden ser reflejos truncos de los tesoros de la sombra, de un orbe intemporal que no se nombra y que el día deforma en sus espejos.

¿Quién serás esta noche en el oscuro sueño, del otro lado de su muro?