Las herramientas y servicios que se abren con la web 2.0 son continuos y sorprendentes, algunos suman nuevas funciones a las ya conocidas, otras amplían algunas características (almacenamiento gratuito de información en línea con o sin límites, distribución de archivos de gran tamaño), otras ofrecen servicios que facilitan la creación y sincronización de notas individuales y colectivas, en texto y voz, y están las que permiten recopilar y organizar la bibliografía para realizar investigaciones.
Entre estas herramientas que han aparecido en Internet hace un tiempo están las dedicadas a la curación de contenidos, es decir, las que recopilan, seleccionan, agrupan y publican recursos sobre temas específicos y los presentan de modo organizado en una página web que se actualiza periódicamente por sus creadores.
La idea central de la curación de contenidos es ofrecer y compartir una selección de los contenidos más apropiados y significativos sobre un tema que se han tomado del inmenso océano de información que caracteriza a la web. Además, esta herramienta genera una red de vínculos y relaciones entre los usuarios que, sin conocerse, tienen intereses comunes sobre un campo de conocimiento, una práctica o un problema.
En el fondo, cada página curadora de contenidos facilita la búsqueda de recursos sobre un tópico aunque, claro está, no siempre los criterios de selección y recopilación pueden ser compartidos por todos. Otro riesgo subyacente es pensar que la cantidad de recursos recopilados es sinónimo de calidad de la información. En este terreno nuevamente apelamos al sentido crítico y reflexivo de cada uno para hacer su propia selección de recursos aplicando criterios significativos.
En este momento las herramientas de curaduría más conocidas son scoop.it y paper.li que son gratuitas y accesibles.
Un sitio de curación de contenidos en el tema tecnologías y educación es:
http://www.scoop.it/t/labtic-tecnologia-y-educacion