Hasta hace un par de años, los y las docentes de los distintos niveles educativos recibían su formación inicial y se preparaban para ejercer sus funciones en la modalidad presencial, en el recinto de aulas físicas con encuentros cara a cara, dejando para una etapa posterior la elección de capacitarse para trabajar con la modalidad de educación a distancia o educación virtual. Pues bien, fue la pandemia y la suspensión de la educación presencial las que determinaron una emergencia educativa no presencial con apoyo clave en plataformas tecnológicas que habilitan las interacciones sincrónicas y asincrónicas.
En este escenario los y las docentes tuvieron una inmersión inmediata en el mundo de las herramientas digitales a través de una capacitación virtual orientada al uso pedagógico de plataformas y entornos virtuales, blogs, videoconferencias, videollamadas, entre otros recursos. Ahora había que seguir enseñando con otras estrategias, medios y recursos para que los y las estudiantes continuaran sus estudios mientras también aprendían a comunicarse y a construir conocimientos de modo mediatizado. Fueron tiempos de reconfiguraciones del rol docente y del rol del alumno y de nuevos desafíos mediados por las tecnologías. Fueron tiempos de nuevos aprendizajes para todas y todos los actores del sistema educativo. Se mezclaron incertidumbres, temores, compromisos, dificultades, expectativas y entusiasmos para asumir un compromiso con la tarea educativa. Con resultados diversos y con nuevas necesidades y objetivos para seguir adelante. También fue y es tiempo de reflexionar sobre lo realizado, sus fortalezas y sus debilidades, y de publicar los estudios que se realizaron en el contexto de la educación no presencial de emergencia, como el artículo que ahora compartimos: Adaptarse al nuevo contexto educativo: hacia un modelo teórico-práctico para la docencia online, de Miguel Ángel Jordán Enamorado y Alicia Ricart Vayá, docentes de la Universidad de Valencia, publicado por la Revista Complutense de Educación (2022).
En el resumen leemos:
“La crisis sanitaria
provocada por el
Covid-19 ha afectado
a la sociedad
en su conjunto
y, en consecuencia,
al mundo de
la educación. Las
restricciones de aforo
y movilidad han
conllevado la implantación
de metodologías de
enseñanza a distancia
o con diversos
grados de presencialidad. Este
nuevo contexto educativo
requiere un proceso
de reflexión y adaptación
metodológica por parte de la comunidad educativa. El objetivo de este trabajo
es contribuir a este proceso aportando unas pautas, orientadas a la creación de
un modelo teórico-práctico, que puedan servir de guía a la hora de diseñar
metodologías y proyectos para la docencia online. La metodología empleada con
tal fin consistió en la revisión de la literatura sobre la evolución de la
pedagogía de la educación a distancia y del rol del docente, las habilidades
del siglo XXI, los principios de
práctica educativa para la docencia online y la evaluación a distancia. Basados
en este marco teórico, hemos elaborado nuestra propuesta, dividida en tres
fases: diseño de las metodologías, impartición de la docencia y trato con los
estudiantes en el entorno virtual. Nuestra propuesta, que ya ha sido
implementada con éxito durante el curso 2020/21, supone una contribución a la
creación de un marco teórico unificado necesario para lograr un correcto
proceso de adaptación al nuevo contexto educativo”.
El artículo completo está disponible en:
https://revistas.ucm.es/index.php/RCED/article/view/76384/4564456561021