25 diciembre 2018

Reflexiones y sentimientos...


Donde el corazón te lleve (fragmento)

“Cada vez que te sientas extraviada, confusa, piensa en los árboles, recuerda su manera de crecer. Recuerda que un árbol de gran copa y pocas raíces es derribado por la primera ráfaga de viento, en tanto que un árbol con muchas raíces y poca copa a duras penas deja circular la savia. Raíces y copa han de tener la misma medida, has de estar en las cosas y sobre ellas: sólo así podrás ofrecer sombra y reparo, sólo así al llegar la estación apropiada podrás cubrirte de flores y de frutos. Y luego, cuando ante ti se abran muchos caminos y no sepas cuál recorrer, no te metas en uno cualquiera al azar: siéntate y aguarda. Respira con la confiada profundidad que respiraste el día que viniste al mundo, sin permitir que nada te distraiga: aguarda y aguarda más aun. Quédate quieta, en silencio, y escucha a tu corazón. Y cuando te hable, levántate y ve donde él te lleve”.



Susanna Tamaro, escritora italiana que alcanzó extraordinario éxito internacional con su novela Donde el corazón te lleve (1994).

20 diciembre 2018

Curación de contenidos: lo bueno y lo riesgoso

Dicen que “curar” contenidos es subrayar y compartir lo subrayado para aprender con otros. En el escenario de las tecnologías digitales, la inagotable información que ofrece Internet es una fuente para que estudiantes y profesores naveguen, exploren, analicen, seleccionen y compartan contenidos en determinados temas y áreas del conocimiento, abonando el enfoque del conectivismo como forma de aprendizaje en tiempos de Internet.

Desde el punto de vista educativo, la curación de contenidos como metodología didáctica, debe orientarse al aprendizaje activo, la creación, la colaboración y la comunicación. Podemos sostener que promover la curación de contenidos forma parte de la competencia digital informacional requerida para ser un estudiante activo y creativo tanto en la dimensión académica como en la vida ciudadana, lo que supone seleccionar y categorizar la información sobre un determinado tema según determinados criterios que permitan valorar la pertinencia y relevancia de las fuentes. Actividad que puede ser actualizada de modo permanente o puede ser acotada a un período de tiempo, por ejemplo para trabajar en un seminario, en una investigación o en una tesis.

En el caso del docente, curar contenidos puede ser una ayuda didáctica valiosa para que los estudiantes indaguen y estudien un tema desde una perspectiva particular o desde autores seleccionados, en un plazo determinado. Ejemplos de esta situación son la elaboración de una secuencia o unidad didáctica en la que incluimos un conjunto preseleccionado de recursos digitales en la web, o el diseño de una webquest con una selección de sitios web para que los estudiantes exploren y analicen información para abordar y resolver un problema.

Un modelo de curación de contenidos comprende un conjunto de fases (Negre, Marín y Pérez, 2014), entre las cuales figuran: 

1. Conceptualización: planificar el proceso de curación estableciendo la temática, proponer y acordar con el alumnado el tema del proyecto a desarrollar estableciendo los criterios de formación grupal y de evaluación.
2. Creación y recepción: establecer la creación de metadatos atendiendo a las distintas fuentes para obtener información, búsqueda y filtrado de información (tipo de buscadores, bases de datos, sistemas de curación…)
3. Valoración y selección: valorar la información recogida y seleccionarla atendiendo a aspectos como el rigor de las fuentes. Adecuación a la temática objeto de curación, calidad, cantidad de las fuentes, etc.
4. Conversión, preservación y almacenamiento: transferir la documentación asegurando su almacenamiento siguiendo los estándares establecidos para ello con la consecuente posterior localización.
5. Acceso, uso y re-uso de la información garantizando su posterior recuperación.
6. Transformación: añadir valor a la información curada, agregando, destilando y remezclando principalmente la información original (Bhargava, 2011). 

Ahora bien, es fundamental destacar que la curación de contenidos debe necesariamente incluir el análisis crítico y reflexivo acerca de aquello que encontramos en Internet ya que la sobreabundancia de información y la yuxtaposición de enfoques sin una clara evaluación y sin propósitos definidos, facilita el mecanismo rudimentario del “copie y pegue” sin la actividad personal del sujeto. Por eso, una estrategia deseable sería que sea el propio estudiante quien realice la curación de un cierto contenido y lo comparta con sus pares, formando una red colaborativa de información con el acompañamiento y mediación de los docentes que dan lugar a la discusión y el debate.

Fuentes:
Leiva-Aguilera, J. y Guallar, J. (2013). El content curator: guía básica para el nuevo profesional de internet. Barcelona: UOC.
Negre, F.; Marín, V.; Pérez, A. (2014). Implementación de un modelo de curación de contenidos para trabajar la competencia informacional en la formación de maestros. Presentado en el XVII Congreso Internacional Edutec 2014, Córdoba, España. Recuperado de http://gte.uib.es/pape/gte/sites/gte.uib.es.pape.gte/files/modelo_cur-cont-maestros.pdf
Posada S., M. (2013). Curaduría de contenidos digitales: un potencial para la educación y el aprendizaje. Virtual Educa 2013.
Romero Tirado, M. (2016). Iniciación a la curación de contenidos en la universidad: una experiencia en el área de psicobiología. RED-Revista de Educación a Distancia, núm. 49. http://dx.doi.org/10.6018/red/49/6

12 diciembre 2018

Diversidad e inclusión en la universidad


Hoy en tiempos de globalización y transversalidad potenciados por Internet y redes digitales accedemos y nos conectamos con un universo rebosante de pluralidad y diversidad que, más allá de hechos discriminatorios que ocurren en la realidad, nos posibilitan construir una mirada amplia, tolerante y solidaria que acepta y respeta al otro y reconoce la diversidad de modos de ser y vivir de grupos y comunidades.  

Las universidades se distinguen justamente por albergar a una amplísima diversidad humana: cultural, lingüística, de género, de capacidades e intereses, entre otras.
Con la intención de sensibilizar a los estudiantes universitarios en la importancia que tiene para su desarrollo integral el fortalecimiento de habilidades sociales desde la mirada intercultural, la Facultad de Psicología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia, México, a partir de los proyectos del cuerpo académico “Educación, cultura y procesos de aprendizaje”, invita año con año a los y las jóvenes a incluirse en experiencias que impliquen interacción con grupos con los que pueden tener diferencias de edad, género, nivel educativo, cultura, lengua, capacidades e intereses.

En esa línea comparto el artículo Diversidad e inclusión educativa en la universidad, desde la generación de procesos interculturales, escrito por un grupo de profesores de la Facultad mencionada, publicado en la revista Decisio, Saberes para la Acción en Educación de Adultos, publicación de CREFAL, N° 47, 2017. El texto describe algunos aspectos relevantes de dos programas (el verano de la investigación y el trabajo con jornaleros agrícolas) a través de los cuales la Facultad propicia que los estudiantes reconozcan, aprecien y valoren las diferencias, como objetivo central de una educación inclusiva. Disponible en:





03 diciembre 2018

Los alcances de la ecología digital

Pawel Kuczynski 

En el debate sobre las tecnologías y sus implicancias en la vida sociocultural, política, educativa y laboral encontramos enfoques deterministas y lineales que poco y nada reflejan lo que sucede realmente con la incorporación y apropiación de las tecnologías por los distintos actores de la sociedad y en diversidad de contextos.
Lejos de los relatos simplistas, reduccionistas y simplificadores, estamos atentos a los procesos no lineales y discontinuos de uso y apropiación de las tecnologías en la construcción de subjetividades y prácticas en distintos ámbitos de la sociedad contemporánea, sabiendo que la irrupción de medios y redes digitales mantiene un ritmo acelerado mientras que los estudios sobre los procesos de adaptación y uso se caracterizan por su escaso número, por lo cual seguimos tendencias sin saber sus alcances e impacto surgidos de investigaciones rigurosas.   

En este escenario, compartimos el artículo: Sobre la nueva ecología de medios en la era digital: Hacia un nuevo inventario de efectos, de Fernando Gutiérrez del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (México), publicado en la revista Razón y Palabra, Vol. 22, 2018.
En una primera parte se explica qué es la ecología de los medios y se señala cómo las tecnologías han observado a través de la historia un rol protagónico en la transformación cultural de las sociedades. Luego se destaca que los nuevos medios digitales no únicamente se desempeñan como extensiones de los medios precedentes, además operan como amplificadores, incluyendo a las remediaciones y las hipermediaciones.
Asimismo se enfatiza que la nueva ecología digital abre retos y oportunidades a personas, empresas e instituciones, en donde tallan las innovaciones. El autor no deja de reconocer la discontinuidad que se presenta en productos innovadores y concluye introduciendo el término sabiduría digital, del cual, en buena medida podría depender el devenir de la especie humana en el imaginario de la cuarta revolución industrial.
El artículo se puede leer en:


24 noviembre 2018

BYOD: Trae tu propio dispositivo al aula


¿Qué es el BYOD (Bring Your Own Device) o “Trae Tu Propio Dispositivo”?
Se trata de una nueva estrategia educativa que consiste en que cada estudiante lleve al aula de clase su propio dispositivo electrónico, sea un móvil inteligente, una notebook, netbook o tableta, para emplearlo en las actividades de aprendizaje favoreciendo de ese modo el uso pedagógico y la integración positiva de las herramientas tecnológicas.


Es una tendencia promovida por European Schoolnet, como parte del trabajo de algunos Ministerios de Educación europeos, que sustituye de manera progresiva a las iniciativas 1:1 en educación (una netbook/dispositivo por estudiante) ante la dificultad o incapacidad económica de los centros educativos y establecimientos de adquirir un dispositivo para cada alumno/a.

Para que la nueva tendencia sea sustentable y efectiva es importante que se cumplan algunas condiciones pedagógicas y tecnológicas, entre las cuales mencionamos:

- Que la infraestructura TIC sea la adecuada, proporcionando una rápida y estable conexión a Internet, desarrollando normas de uso aceptable de los dispositivos y de los entornos en línea.

- Que los docentes participen en instancias de capacitación sobre el uso pedagógico de las TIC en el aula.

- Que el docente organice una mínima planificación con una secuencia didáctica que le permita incluir el uso del dispositivo para realizar determinadas actividades: búsqueda y valoración de información, desarrollo de un concepto, comparación de enfoques, comprensión de una aplicación o plataforma específica, creación de gráficos y cuadros, grabación de video para registrar las lecciones, intercambio de contenido con estudiantes de todo el mundo, entre otros.

Más allá de los inconvenientes por la inestabilidad de las conexiones y de las distracciones que puedan tener los/as alumnos/as cuando usan los dispositivos en las aulas, entendemos que este método BYOD puede favorecer la participación activa e interactiva de los estudiantes con los contenidos de una asignatura o área del conocimiento, proponer una mirada centrada en el uso pedagógico y crítico de las TIC, ampliar las fuentes de información para elaborar conocimientos con formatos multimodales, brindar al profesor nuevas formas de tratamiento de contenidos, y alentar la apropiación de las tecnologías como herramienta útil para los procesos de aprendizaje y de aprendizaje.

Para ampliar recomendamos:



Informe Resumen en español BYOD EUN Enero 2016 INTEF:


15 noviembre 2018

Proyectos integrados: STEAM


En busca de cambios en las formas de enseñar y aprender, surgen distintas propuestas en el mundo educativo como el sistema STEM (acrónimo de los términos en inglés Science, Technology, Engineering and Mathematics), surgido en 2009 en EEUU, que da cuenta de un enfoque científico integrado según el cual la Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas forman un todo donde los elementos interactúan y se afectan unos a otros. El enfoque STEM en educación requiere, pues, la integración de áreas curriculares, el uso de métodos innovadores y alternativos de enseñanza y de aprendizaje, tales como resolución de problemas, proyectos, prácticas de laboratorio y uso de herramientas tecnológicas.  
Años más tarde, a la sigla STEM se le agregó la A para incluir al arte como herramienta expresiva y creativa que acompaña a los proyectos de ciencias, tecnología, ingeniería y matemática, por lo cual llegamos a STEAM.

Los proyectos STEAM constituyen un aporte innovador para mejorar las prácticas educativas ya que implican un enfoque interdisciplinario centrado en el aprendizaje activo y significativo a través de proyectos integrados que permiten la construcción o reconfiguración de conocimientos y el desarrollo de competencias, actitudes y habilidades específicas como el trabajo en equipo, la competencia digital, la iniciativa o la toma de decisiones. En estos trabajos por proyectos la tecnología actúa como nexo de unión con el resto de materias/áreas, ya sea porque los proyectos se basan en crearla, en usarla para desarrollar algo nuevo o en su comunicación a través de las TIC. Así podemos incorporar actividades que van desde la aplicación de gamificación, el aprendizaje-servicio, la robótica y programación educativa hasta el uso de redes sociales o la clase invertida (flipped classroom). 

Más información  y ejemplos de proyectos STEAM los podemos encontrar en:



07 noviembre 2018

Mutaciones en los materiales didácticos en la cultura digital

Las TIC que se expanden en la sociedad digital tienen un enorme potencial en las instituciones educativas tanto para las prácticas presenciales como de educación a distancia/virtual. En primer lugar se pone en cuestión el predominio de los materiales con soporte impreso (libros, manuales, enciclopedias en papel), una tecnología que ha ocupado un lugar central en la escuela para dar lugar a los materiales digitales y multimediales que están disponibles en Internet y que pueden aportar diversidad de situaciones para promover aprendizajes. 

Inmersos en la cultura digital, los educadores y docentes estamos ante el desafío de involucrarnos en la mutación referida a la selección, diseño y elaboración de materiales didácticos que ahora ganan en variedad de lenguajes y formatos digitales con la posibilidad de multiplicar y enriquecer el tratamiento del saber y la construcción de conocimientos.

En este escenario comparto un artículo de Manuel Area Moreira: La metamorfosis digital del material didáctico tras el paréntesis Gutenberg (RELATEC, 2017), "un ensayo que analiza los cambios o mutaciones que se están produciendo en las características y funcionalidades de los materiales didácticos en el contexto de la sociedad digital. Se parte de la tesis que el material didáctico hegemónico de la escuela moderna (específicamente los libros de texto) respondían a la lógica de la cultura impresa caracterizada por empaquetar el conocimiento y de un modelo de desarrollo curricular estandarizado y en masa. En este S. XXI los materiales educativos se ven afectados por la transformación digital cuya mutación se describe en función de cinco dimensiones o ámbitos: la artefactual o tecnológica, la pedagógica, la funcionalidad docente, la funcionalidad discente, y los procesos de producción, distribución y consumo".

La reflexión final de este artículo apunta a considerar que "la metamorfosis del material didáctico no consiste sólo en un cambio del formato tecnológico, sino que debe ser fundamentalmente del relato cultural y de la funcionalidad pedagógica del material".

El artículo completo se puede leer en: